La copa menstrual es un producto de higiene femenina que ha creado una revolución, sobre todo por los beneficios que aporta para la mujer. Cada vez son más las mujeres que la utilizan, sobre todo por todos los beneficios que nos trae al usarla.
Te contamos algunos de ellos.
- Libre de Químicos
La copa menstrual está fabricada en silicona hipoalergénica de grado médico que no provoca ningún tipo de alergia o reacción en nuestro cuerpo. Al usarla estamos evitando toda la cantidad de blanqueantes, perfumes y otros productos químicos que puede absorber nuestro cuerpo con el uso de tampones o toallas. Además, no hay ningún riesgo de desarrollar la enfermedad del síndrome del choque tóxico que estaría supuestamente asociada con el uso diario de tampones.
- No absorbe, sólo recoge
La copa simplemente recoge nuestro flujo menstrual, no la absorbe como las toallas o tampones, por lo que se evitan las irritaciones y la sequedad, especialmente en los últimos días de la menstruación. Los días en los que el flujo es bajo, nos ayuda a mantener intacta la humedad de nuestra vagina, protegiendo la flora vaginal en todo momento.
- Más económica a largo plazo
La copa menstrual te puede durar hasta 10 años, dependiendo de cómo la cuides, es por esto que dejas de invertir mes a mes en opciones desechables como toallas o tampones. Simplemente haces una inversión inicial y tu copa te acompañará durante varios años en tus periodos.
- Úsala hasta por 12 horas
La copa menstrual la puedes llevar puesta hasta 12 horas sin necesidad de pasar por el baño. Por eso, resulta ideal para momentos en los que vas a estar mucho tiempo fuera de casa porque puedes pasar varias horas antes de que tengas que vaciarla, o en lugares donde no tienes acceso a un baño fácilmente, como la playa o la montaña.
- Ecológica
La copa es uno de los elementos que ha hecho que muchas mujeres jóvenes y más conscientes con el medio ambiente, optaran por una mejor alternativa y que no genera kilos y kilos de celulosa, plástico, cajas y aplicadores que tiramos al basurero cada mes.
El material del que está hecho la copa no contamina nada y hasta en el proceso de fabricación de este producto se reduce el uso de agua que se necesita, al contrario de los procesos de producción de toallas o tampones.
- Más cómoda de llevar
Muchas mujeres que se han decidido a probar la copa menstrual destacan, sobre todo, que no notas que la llevas puesta, que puedes utilizarla con cualquier tipo de ropa, sin miedo, y que no sientes que las estás llevando.
Esto permite mantener la naturalidad del movimiento tanto a la hora de hacer deporte como de cualquier actividad en tu rutina. Incluso podrás dormir con la copa puesta.
- Evitas olores.
Los defensores de la copa menstrual son conscientes de que muchos pueden ver un poco de recelo en el contacto con la sangre a la hora de retirarla o de lavarla, pero destacan, como una de sus ventajas, que no huele a nada ni emana olores porque no está en contacto con el aire.